Puerta a Shangri-La 24x35,Lienzo
Este pasadizo evoca sin duda alguna la idea de una utopía, un acceso al final del cual nos encontraremos con un paraíso terrenal, quizás con la utopía del Himalaya: una tierra de felicidad permanente, aislada del mundo exterior.
Nuevamente el pintor recurre a los colores azules donde el autor parece sentirse más cómodo para expresar esa espiritualidad. No es extraño dado que el color azul suele relacionarse con elementos de la naturaleza, tales como el agua y el aire, y forma asociaciones positivas de paz y tranquilidad. Además, inspira sentimientos de amistad, lealtad, seguridad y confianza.
El pasadizo del cuadro parte de un azul oscuro para ir posteriormente aclarando y llegar finalmente a la luz blanco del fondo del mismo. Las plantas a los lados del pasadizo podrían actuar de señales que van marcando el camino a seguir como si se tratase de señales indicativas en cierto modo como si se tratase de hachones hacia la iluminación final. El color azul oscuro podría asimismo ser un símbolo de la ignorancia que vamos dejando atrás cuando nos aventuramos por este camino del conocimiento. Una vez más es fácil reconocer el simbolismo masónico del autor.
Este pasadizo evoca sin duda alguna la idea de una utopía, un acceso al final del cual nos encontraremos con un paraíso terrenal, quizás con la utopía del Himalaya: una tierra de felicidad permanente, aislada del mundo exterior.
Nuevamente el pintor recurre a los colores azules donde el autor parece sentirse más cómodo para expresar esa espiritualidad. No es extraño dado que el color azul suele relacionarse con elementos de la naturaleza, tales como el agua y el aire, y forma asociaciones positivas de paz y tranquilidad. Además, inspira sentimientos de amistad, lealtad, seguridad y confianza.
El pasadizo del cuadro parte de un azul oscuro para ir posteriormente aclarando y llegar finalmente a la luz blanco del fondo del mismo. Las plantas a los lados del pasadizo podrían actuar de señales que van marcando el camino a seguir como si se tratase de señales indicativas en cierto modo como si se tratase de hachones hacia la iluminación final. El color azul oscuro podría asimismo ser un símbolo de la ignorancia que vamos dejando atrás cuando nos aventuramos por este camino del conocimiento. Una vez más es fácil reconocer el simbolismo masónico del autor.
Este pasadizo evoca sin duda alguna la idea de una utopía, un acceso al final del cual nos encontraremos con un paraíso terrenal, quizás con la utopía del Himalaya: una tierra de felicidad permanente, aislada del mundo exterior.
Nuevamente el pintor recurre a los colores azules donde el autor parece sentirse más cómodo para expresar esa espiritualidad. No es extraño dado que el color azul suele relacionarse con elementos de la naturaleza, tales como el agua y el aire, y forma asociaciones positivas de paz y tranquilidad. Además, inspira sentimientos de amistad, lealtad, seguridad y confianza.
El pasadizo del cuadro parte de un azul oscuro para ir posteriormente aclarando y llegar finalmente a la luz blanco del fondo del mismo. Las plantas a los lados del pasadizo podrían actuar de señales que van marcando el camino a seguir como si se tratase de señales indicativas en cierto modo como si se tratase de hachones hacia la iluminación final. El color azul oscuro podría asimismo ser un símbolo de la ignorancia que vamos dejando atrás cuando nos aventuramos por este camino del conocimiento. Una vez más es fácil reconocer el simbolismo masónico del autor.